Plazas dijo que el llamado a juicio es un atropello de la Fiscalía, que ha permitido una mentira y un montaje extraordinario en su contra. Y que en el caso de tortura no hubo tal cargo en el proceso, por lo que el fiscal Iguarán hizo una apreciación imprudente.

Insistió en que en el Palacio no hubo desaparecidos porque en el piso superior del edificio aparecieron, según el tribunal mencionado, varios cadáveres no identificados que en número corresponden con el de la lista de desaparecidos.

Sostuvo que nada tuvo que ver con las torturas que se cumplieron en la Escuela de Caballería que él comandaba, según varios testimonios, porque su labor como director era operativa y no de inteligencia.

"Yo no tenía que preguntar quien era quien, lo de la identidad de las personas y lo que hacían era labor de inteligencia, no operativa", dijo Plazas al evadir una respuesta sobre su responsabilidad en los hechos presuntamente ocurridos en la unidad bajo su mando.

Reiteró que la Fiscalía le ha dado credibilidad a testigos falsos y que ha cometido un atropello a todas las normas del derecho. "Tarde o temprano tendrá que resarcirme por el atropello de que he sido objeto", afirmó.

http://www.caracol.com.co/noticias/547705.asp