Mirta tenía 19 años, estaba embarazada. Roald tenía 28. Los dos eran militantes Montoneros.

Roald había nacido en Laboulaye, Córdoba. Su padre, Juan Alberto Montes Bradley era un conocido agrimensor, urbanista e historiador que fue Rector de la Universidad Tecnológica Nacional de Rosario bajo el gobierno peronista.

Mirta provenía de Bahía Blanca. Su familia fue objeto de seguimientos desde mediados del ‘76, y en octubre del ‘76 el padre de Mirta fue secuestrado por personal del V Cuerpo del Ejército con el objeto de conseguir el domicilio de Mirta.

Estando bajo secuestro, al padre de la víctima le informaron que un grupo represivo partió desde Bahía Blanca hasta La Plata para realizar un allanamiento ilegal en una casa de 123 entre 33 y 34, de esta ciudad. Le dijeron que Mirta se había defendido muy bien. Dieron a entender que había logrado escapar.

Del resto de la historia, la familia se enteró por la abundante información periodística que apareció en los diarios el 26 de noviembre de 1976, en los que se cuentan "los golpes asestados a la guerrilla en La Plata", según la primera plana del diario "El Día" de esa fecha.

Allí se consigna que el entonces Director de Investigaciones de la Policía, Miguel Etchecolatz, llamó a la prensa y le proyectó un video (que solía exhibirse a efectivos de Policía) en el que se mostraba a la sociedad argentina sobre la que "se cierne un enemigo, una mancha negra simbolizada por el imperio del comunismo y el marxismo".

Fieles al estilo de la época, los diarios reproducen las palabras de Etchecolatz, hablan de "exitosos procedimientos" y muestran varias fotografías con el "armamento secuestrado".

Las crónicas relatan que más tarde los periodistas fueron invitados a tres casas que habían "caído": una en 63, entre 15 y 16; otra, en 139 entre 48 y 49 —donde estaba Mirta Dithurbide—; y la conocida casa de calle 30, entre 55 y 56, donde vivían Daniel Mariani y Diana Teruggi junto a su beba hoy desaparecida, Clara Anahí. En todos los operativos actuó el "Comando Zona 1 de La Plata".

En esa casa se encontraban Mirta, Roald, Elida D' Ipólitto, Miguel Tierno, María Graciela Toncovich y Enrique Desimone.

Según los diarios, todo ocurrió el 22 de noviembre de 1976, dos días antes que fuera atacada la casa de calle 30. En los periódicos aparecen incompletos los nombres de las víctimas y algunos apodos entre los que se encuentra el de "Mimí" (Mirta Noemí Dithurbide).

La familia no tuvo más noticias hasta enero del 2004 cuando encontraron en el Registro de las Personas certificados de defunción que coinciden en fecha con lo que pasó con las víctimas. Los certificados indicaban una muerte por "pérdida de masa encefálica" a raíz de un balazo en la cabeza.

Información proveniente del informe de prensa de la APDH La Plata sobre las declaraciones en el Juicio por la Verdad.