Detenidos-Desaparecidos el 13 de julio de 1977 en Capital
José Daniel Bronzel, su esposa Susana Pedrini de Bronzel, y su madre Cecilia Podolsky de Bronzel.
José Daniel Bronzel tenía 28 años cuando fue secuestrado junto a su esposa Susana y a su madre Cecilia el 27 de julio de 1976. Era arquitecto y docente en la Universidad de Buenos Aires.
Susana Elena Pedrini de Bronzel tenía 28 años cuando fue secuestrada. Como su esposo, era arquitecta y docente en la Universidad de Buenos Aires. Estaba embarazada de un mes y medio. Su cuñado Antonio Mosquera también desapareció.
Los tres fueron asesinados el 20 de agosto de 1976 en la masacre de Fátima, Pdo. de Pilar, Prov. de Buenos Aires. Los cuerpos de José Daniel y Susana fueron recuperados, identificados y enterrados en el Cementerio Británico en noviembre del 2000. Susana estaba embarazada con dos meses y medio de gestación cuando fue asesinada.
Cecilia "Chola" Podolsky de Bronzel era la mamá de José Daniel. Fue secuestrada junto a él y a Susana. Tenía 51 años de edad y era ama de casa.
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Después de más de 20 años, antes de salir de la Argentina vi por tele que habían encontrado a José. Mi relación con los Bronzel no es de "sangre" pero fue y sigue siendo más fuerte que eso. Chola fue la hermana querida de mi madre y Alberto, José y Mario mis tios y primos del alma. Cuando sucedió todo yo tenía 17 años. Pero recuerdo todo perfecto, mi papá se contactó con coordinación federal (creo) ministerio del interior (Hareguindeguy), sólo le decían la señora está bien, de los chicos no podemos decirle nada. Esta pesadilla duró mas o menos 1 año y medio que nos enteramos que ya no había a nadie a quien buscar. De José puedo contar que era una persona NOBLE ,tranquilo, luchador, talentoso en su profesión,BUENO,callado, y que cuando algo lo no estaba bien para él se involucraba para solucionarlo, aunque sea una tontería. De la tía que era una madraza que daba la vida por su familia y de hecho la dio, que fue parte de mi vida, que nunca me voy a olvidar de los veraneos, de las tortas y y tampoco nunca olvidé esos años que nos robaron los afectos, las ilusiones. Por eso desde muy lejos y para siempre están conmigo. A 30 años de esta tragedia, mi recuerdo para los que fueron parte de mi vida y los que permanecen junto a mí en la memoria. Josecito, el mayor de mis dos únicos primos, el nieto preferido de nuestra bobe, el hijo de mi amado tío Alberto. En la adolescencia fue Joe, con los amigos del Colegio Buenos Aires y mi hermano Héctor, tan querido por sus 3 primas. Crecimos... al elegir una carrera eligió la mía, arquitectura, qué hermoso!. Siempre unidos hasta en las distancias, que increíbles situaciones, plantearon en la vida de nuestros padres, nunca comprendidas. Para mi tía Chola, linda y amiga de las sobrinas de Alberto, la tía de las delicias y de las memorables reuniones de amigos, el saber que en la familia de Jacobo, el único hermano de Alberto, fue siempre recordada. Hoy cuando la vida ha dado tantos golpes, deseo unirme a los que los quieren y quedamos marcados por estos asesinos, decir que están presentes a través de los días de mi vida, que permanecerán en la memoria de nuestros hijos y sus familias. Con amor a José y a la Tía Chola de Diana Bronzel. |
