desaparecidos

Sin Marco

Testimonios



Alicia Rodríguez




PREAMBULO Y CONFESION

Cada vez que trato de volver al período 1974-1977, una angustia sorda me sube a la garganta. Miro a mi alrededor: mis hijos, los árboles de la calle, el aire transparente del verano... Pienso en ellos que no están, que se llevaron consigo a sus hijos, a los árboles de las hipotéticas calles en que vivirían, al aire de todos los veranos...Ellos se quedaron en sus 24, 25 o 26 años, eternamente jóvenes.

Me siento culpable. Creo que no hice lo posible para que las cosas fueran diferentes. Creo que cometí muchos errores. Creo que fui cobarde.

Por eso es que quiero escribir sobre ellos,a los que yo conocí, a los que perdimos en la vorágine. Para que no mueran de nuevo, para rescatarlos del olvido.

LA ESCUELA DE PERIODISMO DE MENDOZA

En 1973, Daniel Prieto asumió la dirección de la antigua Escuela Superior de Periodismo, que pasó a llamarse entonces Escuela Superior de Comunicación Colectiva.

Este director, que no llegaba a los 30 años, era una persona muy especial. No sólo por su relación con los alumnos_ de igual a igual_, sino, sobre todo, porque creía que la comunicación era un fenómeno global y que debía ser estudiado con un carácter profundamente antiimperialista.

A raíz de ésto, durante muchos sábados, los alumnos y él se reunieron para cambiar los planes de estudio de la Escuela. De allí salieron las nuevas materias entre las que estaban: Historia de las Ideas Políticas Contemporáneas, Historia de Latinoamérica y su Liberación, Semiótica del Texto y de la Imagen, etc.

Yo participé en estos talleres y luego en la elaboración del programa de Lingüística.

Es evidente que un programa de estudios con esa características atraería a mucha gente que simpatizaba con las ideas de liberación y de construcción de una sociedad justa.

Razones personales me llevaron a abandonar los estudios ese año para recomenzar en 1974.

UN AÑO INTENSO

Luego del golpe militar chileno de septiembre del 73, una avalancha de chilenos llegó a Mendoza huyendo del horror. Entre ellos, varios estudiantes que recalaron en las Escuelas de Comunicación Colectiva, de Antropología y de Servicio Social.

En 1974 ese primer año de nuestra escuela estaba compuesto por la mitad de estudiantes argentinos y la otra mitad chilenos. Daniel Prieto había levantado las barreras burocráticas para que éstos pudieran inscribirse.

Ese fue el curso al que pertenecieron Virginia Suárez (Vivi), Raúl Reta, Daniel Moyano y Billy Hunt, todos detenidos-desaparecidos.

En ese año 1974, el proyecto para que la Escuela pasara a formar parte de la Universidad Nacional de Cuyo, parecía a punto de concretarse. Se logró el medio voto de la Cámara de Diputados pero no así el de la Cámara de Senadores, por problemas de presupuesto, según decían. En el mes de julio, se realizó la "toma" de la Escuela para presionar y protestar.

Allí, aparte de las asambleas y de las "guardias" que hacíamos (y de las cuales salieron varias parejas), por las noches abundaban las guitarreadas, los partidos de truco y la convivencia. Y estaba Billy, con su inagotable alegría, cantando "El corralero" pero en chiste, contestando los ataques políticos con una broma, siempre amigo de todos. Y también Daniel Moyano al que los chilenos habían apodado el "Torombolo" por el personaje de la pequeña Lulú, con su pelo revuelto, desatinado, hablando a borbotones, apasionado.

EL NEGRO AMADEO Y EL PRINCIPIO DEL FIN

1975 fue el año en que todos descubrimos la cara del horror. En junio, nuestro compañero del 4º año, Amadeo Sánchez, fue asesinado por la Triple A, organización dirigida por López Rega, amigo y consejero de la presidenta Isabel Perón.

Costaba pensar que el Negro, el que compartía con nosotros milanesas mientras nos hablaba fervorosamente de un futuro mejor, estuviera muerto.

A partir de ese momento comenzó el terror, las campañas para descubrir infiltrados o informantes de la policía. Comenzó la desconfianza.

Al mismo tiempo, grandes cambios se producían en el gobierno nacional que encargó a las Fuerzas Armadas la represión de lo que ellos llamaban la "subversión".

Aún cuando las desapariciones comenzaron después del golpe de marzo del 76, no se puede olvidar que desde mucho antes el Terror con mayúsculas se había instalado en el país.

En ese año 75, Daniel Prieto se exila en México, al igual que Enrique Dussel, profesor de filosofía de la Escuela y gran generador de cambios. A fines de ese año, cae preso Jorge Bonnardell, profesor muy querido. Sufre las más atroces torturas y muere atropellado en Francia tiempo después de su liberación.

LA VORAGINE

A comienzos del 76, las aulas de la Escuela están semivacías. Profesores y alumnos encarcelados, o expulsados (todos los chilenos entre otros).

En junio de ese año desapareció Vivi. De los demás no sé la fecha exacta. Raúl desapareció un año después. Raúl, el muchacho lleno de vitalidad que hasta había cruzado a Chile en su moto...

De la desaparición de Aldo Casadidío, el poeta, el personaje extraño de la escuela, yo me enteraría mucho después, al volver a la Argentina en 1983.

A Kelly Moretti no la conocí muy a fondo. Ella estaba en otro curso. Pero siempre me impresionaron su seriedad e inteligencia cuando hablaba en las asambleas.

Vivi, Daniel, Raúl, Billy...¿Cómo eran? Como todos nosotros: con proyectos, con sueños, con ilusiones en el futuro, con amor a la vida y a los seres humanos. Y dueños también de una gran, gran ingenuidad.

{-- Indice