Acta 21 de Mayo de 2001 

Juicio por la Verdad, Mar del Plata


  

En la ciudad de Mar del Plata a los veintiún días del mes de mayo de dos mil uno, siendo las 10 hs., fecha fijada para la presente; se constituyen en la sala de audiencias del Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Mar del Plata sus integrantes Dres. Mario Alberto Portela, Roberto Atilio Falcone y Néstor Rubén Parra, juntamente con el Sr. Secretario, Dr. Facundo Luis Capparelli. Acto seguido el Roberto Atilio Falcone, quien presidirá la audiencia, solicita al Sr. Secretario que informe acerca de la presencia de las partes. Seguidamente el Dr. Capparelli certifica que se encuentran presentes el Sr. Fiscal General, Dr. García Berro, como asimismo los representantes legales del Colegio de Abogados de Mar del Plata, Consejo Escolar de General Pueyrredón; Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (Mar del Plata) APDH; Madres, Familiares y Abuelas de Detenidos y Desaparecidos; Asociación Abuelas de Plaza de Mayo MdP; Argañaraz de Fresneda María de las Mercedes y Dr. Fresneda Tomás; Dr. Arestin Salvador Manuel; Dr. Alais Raúl Hugo; Dr. Candeloro Jorge Roberto; Dr. Centeno Norberto Oscar; Renzi Lidia Elena y Vacca Nora Inés; Iorio Liliana Inés; Lazzeri Patricia Emilia, Retegui Liliana Beatriz Ramona; Garaguso Delia Elena y Roldan Tristán; Bourg Juan Raúl y Rodríguez de Bourg Alicia Isabel; los Dres. Di Matteo, Zabala Rodriguez, Palacios, Germino, Wlasic, Murgier, Sciocia, Cazeaux, Nudelman y Battaglia. Seguidamente, el Sr. Presidente, convoca a prestar declaración testimonial al Dr. Pedro José Azcoiti, domiciliado en calle 66 nº 3344 de Necochea, quien previo juramento de ley manifiesta que: el día 9 de abril de 1976 entre las tres y cuatro de la madrugada un grupo de diez personas dirigidas por el oficial del Ejército de apellido Tocalino ingresaron a su casa, revisaron exhaustivamente su dormitorio y se lo llevaron detenido. Que había tres camiones del Ejército y dos o tres camionetas de policía en una de las cuales lo subieron, lo llevaron a la Comisaría del Centro -Seccional Primera- lo dejaron en un calabozo hasta la mañana siguiente. Que a las diez u once de la mañana junto con Aníbal Del Prado, Diaz y Povilaitis los subieron esposados a una camioneta de policía y lo trasladaron a la comisaría Cuarta de Mar del Plata. Que estuvo tres días detenido en un calabozo con Del Prado. Que a la tercera o cuarta noche un suboficial de policía de apellido Villarreal les dijo "quédense tranquilos que ustedes vuelven, pero tengan cuidado, no vean a nadie"; le vendaron los ojos, lo subieron a la parte trasera de un automóvil y luego de un trayecto de unos quince o veinte minutos, los bajaron en un lugar donde, cre recordar, se escuchaba el ruido del mar. Que lo llevaron a un cuarto cerrado, le desataron las manos y se lo llevan a Del Prado e inmediatamente subieron el volumen de una radio mientras empezaba a escuchar los gritos de Del Prado. Que al rato lo buscaron a él, lo hicieron desnudar, lo estaquearon de muñecas y tobillos sobre una camilla metálica y lo comenzaron a torturar con picana eléctrica mientras le tapaban la boca con una almohada. Que le preguntaban por las armas, mientras lo increpaban diciéndole "hijo de puta, zurdo de mierda". Que lo tuvieron treinta o cuarenta minutos. Que luego de la tortura se relajó hasta que le dijeron "no te quedes tan tranquilo que mañana venís de nuevo". Que luego los llevaron de regreso a todos a la Comisaría Cuarta donde estuvo tres o cuatro noches más. Que finalmente salió en libertad el día 16 de abril desde la misma seccional. Que él había militado en la Juventud Radical en Necochea y en La Plata, donde era presidente del centro de estudiantes de Derecho representando a Franja Morada, pero siempre condenó la lucha armada. Que seguidamente el compareciente es interrogado por el Tribunal, el Ministerio Público y los representantes legales de los denunciantes. Que se deja expresa constancia que en la Comisaría Cuarta estuvo con Amílcar González, Perino y Garamendy. Que a Bicarelli lo conoce y que por comentarios de otros detenidos, le consta que participó en la represión ilegal. Que su familia hizo gestiones en su favor a través de dirgie tes políticos radicales, concretamente Conrado Storani y Raul Alfonsín, quienes sabe se entrevistaron con el ministro del Interior, Gral. Harguindeguy. Que si bien éste manifestó que cada jefe de zona era dueño absoluto de su área, se imagina que estas gestiones influyeron para su rápida liberación. Que concluida la declaración testimonial, siendo las 11.30 horas, el Sr. Presidente, convoca a prestar declaración testimonial al Sr. Oscar Aníbal Del Prado, domiciliado en calle 69 nº 1205 de Necochea, quien previo juramento de ley manifiesta que: el día 9 de abril de 1976 un grupo de treinta personas a cargo del capitán Tocalino, ingresaron a su casa, destrozaron todo, robaron plata y lo llevaron detenido. Que dos camionetas del ejército y otros móviles cerraron el tránsito en toda la manzana. Que lo subieron a una camioneta de la policía a cara descubierta, fueron a la casa de Fulgencio Diaz a quien también subieron en la camioneta y de allí lo llevaron a la Comisaría del Centro a cargo del Comisario Francisco Ríos y del Sub comisario Larrea. Que lo colocaron en un calabozo y la mañana siguiente lo llevaron a la oficina del Comisario donde personal del Ejército le tomó declaración, luego lo subieron a una camioneta de la policía esposado y lo trasladaron a la Comisaría Cuarta de Mar del Plata donde fue alojado en un calabozo con Aizcoiti. Que en la Cuarta estaban Perino, Antonio Povilaitis, el Sr. Aramburu y su hija el Dr. Garamendi y Basave. Que su familia concurrió a dependencias militares y policiales y en todos lados negaron su detención. Que a los cuatro días su familia se enteró por medio de un policía oriundo de Necochea, Fernández, que estaba en la Cuarta. Que durante su cautiverio también recurrieron a las autoridades de la Iglesia, que en una oportunidad el secretario de Romulo García de apellido Pérez le confirmó a su cuñado que él había sido torturado. Que a los tres o cuatro días de haber llegado a la Comisaría Cuarta un policía de apellido Villarreal les dijo "quédense tranquilos que ustedes vuelven pero tengan cuidado, no vean a nadie"; le vendaron los ojos, lo subieron a la parte trasera de un automóvil junto con Azcoiti, una chica Martínez Tecco y otros y luego de un trayecto de unos quince o veinte minutos, los bajaron en un lugar que no tiene ni idea donde era, pero recuerda que para ingresar hicieron un giro a la izquierda y el camino era de pedregullo. Que lo llevaron a una habitación cerrada y escuchó una voz que le dijo "que hacés Calito", lo patearon y lo hicieron desnudar, lo tiraron sobre el elástico de una cama con el colchón humedecido y lo estaquearon de manos y pies; subieron la música y empezaron a interrogarlo mientras le aplicaban tortura con picana eléctrica por todo el cuerpo. Que le preguntaban quien lo había afiliado al partido comunista, le preguntaban por las armas, por Juan Carlos De Francisco y Luis De Francisco. Que el conocimiento político era muy errado, mezclaban radicales con marxistas, pero que tenían información sobre su actividad mucho tiempo antes del golpe. Que nunca tuvo militancia armada pero desde los diez años de edad militaba en PComunista. Que en Necochea muchos civiles cooperaron con el golpe, en 1975 se había formado el "Círculo de Amigos de las Fuerzas Armadas". Que luego de la sesión de tortura lo hicieron juntar sus ropas gateando por el piso, mientras le pisaban los manos y lo pateaban. Así le fracturaron dos dedos de una mano y le lastimaron seriamente la mandíbula. Que luego los llevaron de regreso a la Comisaría Cuarta donde estuvo varios días en un calabozo solitario. Al día posterior a la tortura lo vio desde lejos un médico que le entregó una caja de Dolex y le dijo que ya se iba a curar. Al tiempo lo llevaron a un pabellón compartido y pudo ver a Lencinas, Battaglia, Pablo Hernández y a los demás que ya ha nombrado. Que el día de su cumpleaños el 14 de agosto su madre pudo entrar a verlo, le llevó ropa y comida. Que esa misma noche lo sacaron del pabellón con los ojos vendados y lo torturaron en dependencias de la misma Comisaría Cuarta. Que le hicieron las mismas preguntas que la vez anterior, quien lo interrogaba era la misma persona, que lo desnudaron, le sacaron un zapato, y le bajaron un poco los pantalones, mientras le pasaban corriente por el dedo del pie y los testículos.. Que luego lo llevaron a un calabozo solo y hasta que lo liberaron lo sacaron en dos oportunidades más al mismo lugar que lo habían llevado la primera vez. Que entre el personal de la Comisaría Cuarta recuerda al oficial Simón al subcomisario Asad, a Blaustein, al cabo Hernandez que era particularmente odioso porque le hacía comer la comida desde el piso, y al cabo Villarreal. Que ellos sabían todo lo que pasaba en la comisaría como también que gente que se llevaban no regresaban. Que a principios de octubre lo llevaron a la guardia y le devolvieron sus pertenencias, lo trasladaron al GADA 601 donde lo recibió el Coronel Cornejo quien le impartió un sermón destacando las "virtudes de los jóvenes occidentales y cristianos, que tenía que olvidar rapidamente lo ocurrido y que no hiciera más política porque lo iban a matar". Que lo largaron en la puerta del GADA 601 mientras hacía dedo hasta que lo levantó la misma camioneta que lo había llevado, lo dejaron en la terminal y volvió a Necochea. Que seguidamente el compareciente es interrogado por el Tribunal, el Ministerio Público y los representantes legales de los denunciantes. Que se deja expresa constancia que Povilaitis y Garamendi le comentaron a él que Bicarelli los torturó. Que conoce tres casos de desaparecidos en Necochea, Vieytes, Millares y Daniel Garramone. Que Bicarelli maltrató a la esposa de Garramone, cuando ésta fue a reclamar por su marido, y le dijo que no podía hacer nada porque estaba operando personal del ejército. Que él salió con problemas en los riñones y durante un año tomó pastillas para poder dormir. Que la diferencia de trato y tiempo de detención respecto de Aizcotiti entiende que se debe al aspecto ideológico. Que con él se ensañaron, encontraron un zurdito en estado puro y se divirtieron. Que tirarle la comida y hacerlo comer del piso es una forma de tortura. Que en el golpe no hubo ni errores ni excesos, sino que estuvo detenidamente planificado. Que el objetivo fundamental era quebrarle el espinazo a todo movimiento popular, que la guerrilla era un aspecto. Que desde la perspectiva y lógica de los militares, él se asume como culpable. Que siendo las 13.00 horas se dispone un cuarto intermedio por espacio de diez minutos. Que se reanuda la audiencia siendo las 13.20. Seguidamente, el Sr. Presidente, convoca a prestar declaración testimonial al Sr. Mario De Francisco, domiciliado en calle 51 nº 3065 de Necochea. Quien previo juramento de ley manifiesta que: el día 26 de marzo de 1976 en horas de la noche en una confitería de Necochea fue detenido por un grupo de policías y militares, lo subieron a un camión y lo llevaron a la comisaría del Centro de Necochea donde lo metieron en un calabozo hasta la mañana siguiente. Que al otro día lo trajeron a la Comisaría Cuarta de Mar del Plata, donde lo metieron en un calabozo chico, previo paso por el GADA 601. Que al día siguiente lo vio a Amílcar González en un calabozo en muy mal estado. Que a los pocos días lo encapucharon y lo tiraron dentro de un auto, lo llevaron a un lugar donde había árboles, lo bajaron por una escalera ancha y en una habitación le bajaron los pantalones, le ataron las manos y los tobillos y lo acostaron sobre una mesa, lo sometieron a tortura de picana eléctrica durante alrededor de veinte minutos. Que le preguntaban por sus hermanos, por Garamendi, Basave y por las armas. Que el oficial Fernández llamó a su casa y avisó que estaba en la Cuarta. Que a los seis o siete días le dieron las pertenencias y lo liberaron desde la Comisaría Cuarta. Que seguidamente el compareciente es interrogado por el Tribunal, el Ministerio Público y los representantes legales de los denunciantes. Que se deja expresa constancia que Garamendi y Basave le comentaron que habían sido detenidos por Bicarelli, que los golpeó dentro de la comisaría de la Villa Diaz Velez en Necochea. Que siendo las 14 horas concluye la declaración y el Sr. Presidente convoca a las partes para la próxima audiencia del día 28 de mayo a las 10 horas. Citando a las partes para la firma del acta el día miércoles 23 de mayo entre las 11 y las 13 hs. Firmando los comparecientes de conformidad, todo ello ante mí, de lo que doy fe.