desaparecidos


La difícil "tarea" de escribir






A las 0,30 horas, no es un horario conveniente para comunicarte y menos aún si estás durmiendo y hay que levantarse , porque antológicamente el proceso posterior a la duermevela no se produce (a pesar de los estudios psicológicos); entonces te disponés a buscar la lapicera y el papel , que siempre están juntos, en un eterno semi-sueño, esperando que llegue el momento dichoso y ansiado en que tus sentidos los hagan llegar a la realidad; y en un proceso humano y universal te disponés a escribir.

Comenzás por relatar los momentos previos a tu verdadera escritura, para que, poco a poco, vayas entrando en ella. Por ejemplo, decís que te levantaste porque no podías dormir, que buscaste los elementos gráficos, y te dispusiste a usarlos..

Luego, si tu historia, o mejor llamémosle desahogo, porque seguramente hay algo que tenés en la garganta o en la punta de los dedos y no querés que se te escape por las uñas o por la boca; entonces lo volcás en el papel, a manera de expulsión, de encuentro de la realidad, de desahogo, y allí esta.

Eduardo Luis Vicente